Vive el presente. Olvida el pasado. Sé feliz.

Las situaciones de la vida cambian constantemente en un abrir y cerrar de ojos. A veces estás feliz, a veces estás triste, por alguna u otra razón. Lo que hoy nos preocupa y nos parece difícil e incierto -aunque en ese momento no lo veamos- de una u otra manera nos ayuda a crecer y a mejorar cada día.

Estos cambios pueden ocurrir en cualquier momento de nuestras vidas. Momentos tristes en los que sentimos miedo, preocupación, incluso pensamos que algún problema nunca pasará, al final siempre con el tiempo, ese problema se minimiza. Momentos de alegría en los cuales sentimos que tenemos todo en la vida, y de repente llega algo o alguien para destruir nuestros sueños e ilusiones.

Hay personas que se niegan a darse otra oportunidad tan sólo por el hecho de haber tenido varias desilusiones, ya sea con alguien, un lugar o una cosa, se quedan toda su vida añorando el pasado, sin darse cuenta de que tienen toda una vida por delante. Otras simplemente avanzan y toman estas desilusiones como aprendizaje, no viven del pasado sino que aprenden de él para vivir el futuro.

La vida es así, está llena de etapas que tienes que pasar, no puedes quedarte añorando el pasado toda la vida. No te aferres a un error, aprende de él. No mires con nostalgia el pasado, ni esperes que regrese. Mira las situaciones ya pasadas como experiencias, y ve marcando en tu libro de vida las cosas que ya has vivido, y haz todo lo que aún te falta por hacer.

La vida se vive de momentos, y de momento en momento es que se nos va la vida. El tiempo pasa y las cosas más importantes y verdaderamente valiosas se nos van por tratar de volver a un pasado que jamás volverá y que a decir verdad es lo mejor que nos puede pasar. Todo pasa por una razón, así no lo veas en ese momento. Todo absolutamente TODO tiene una razón de ser. Algunas personas deben aprender a entender que si algo no está con nosotros es porque algo mejor vendrá, y ciertamente así es.

En este momento, siento que no me falta nada. Estoy feliz, y sé que estaré feliz por un largo rato.

Un feliz, Harold.